He tenido la suerte de poder compartir con los Panches Surfers los momentos, previos y posteriores, a sus tres últimos conciertos, incluyendo uno un Úbeda y este último en Burriana. Podríamos decir que he sido un corresponsal de guerra en «las guerras surf», participando en las espartanas previas a sus actuaciones. Lo que me he encontrado es una banda con un nivel de profesionalidad máxima, un compromiso con la música y quien les contrata insuperable y una entrega a el público (les conozca o no) a prueba de bombas. Bueno, tampoco han faltado risas y cachondeo, que no somos monjes.
El resultado de esto es que cuando Les Panches Surfers salen al escenario sabes que lo van a dar todo por esta música, como hicieron en el Quasimoto. Aquellos que no les conocían, se sorprendieron disfrutando con una banda entregada, impresionante en directo a la vez que muy divertida. Los que les conocemos,lo pasamos en grande, porque descontado el sacrificio y la profesionalidad, disfrutamos siempre de su categoría como músicos.