Terminamos el Record Store Day en el Rock Palace, en otro sarao de los Capitanes. Y el que no se divierte en un concierto de los Capitanes, no merece ni ser grumete de Chanquete. Es más inutil que Schettino, el que fuera capitán del Costa Concordia.
El caso es que uno, que no es seguidor del garaje, sale de los bolos de esta gente con una sonrisa de orega a oreja y espera con mucho interés que lancen su primer disco. Porque lo que muestran en directo es de muchos quilates